Para sobrevivir, el
ser humano tuvo que hacer uso de diversas técnicas, es decir, usó su inventiva.
Los orígenes de una técnica en muchos casos son difíciles de establecer. Varios
de ellas se han desarrollado simultáneamente en distintas partes del mundo o
fueron concebidas de forma similar; pero casi siempre, una técnica surge de la
necesidad de dar respuesta a un problema. De la misma manera, esta invención cubre
una necesidad, pero al mismo tiempo modifica a la sociedad y al entorno. Por
ello se establece la interacción entre la técnica, la sociedad y la naturaleza.Cada
aplicación técnica ha tenido repercusiones en la vida de las personas y en el
entorno natural. Las técnicas y el estudio de ellas, la tecnología, se enriquecen constantemente y responden a las
necesidades de los diferentes grupos, quienes, paradójicamente, también se ven
afectados por la forma en que ciertas técnicas o avances tecnológicos alteran
la naturaleza. Debido a esta constante retroalimentación, la técnica se
considera como una práctica social y se ha desarrollado de manera paralela a la
cultura.
Se puede decir que,
gracias a la técnica, la cultura se ha esparcido a lo largo del planeta y
viceversa. Cada sociedad ha contribuido con su "granito de técnica y, por
supuesto, de cultura"